He estado varias veces en verano y otoño de 2021. En Arroyomolinos, cerca de Alcorcón/Móstoles, en un polígono industrial, Mambo Swing es un local enorme dedicado al baile con dos pistas grandes (dos salas) y una terraza.
En ambas salas, el suelo y la acústica son magníficas, con unos techos muy altos que han albergado bailes de salón durante mucho tiempo, abriéndose ahora al SBK.
La sensación que he tenido allí es de estar en una sala de baile auténtica, amplia. Nada que ver con otras salas que son adaptaciones de discotecas que necesitan meter público un jueves o un domingo.
Algunas sillas alrededor de la pista me han recordado a las salas que se habilitan para los congresos, aunque en este caso con barra de bar incluida. La terraza de fuera me ha parecido ser para tomar algo más que para bailar.
Mi visita de otoño fue a raíz de un social posterior a una visita con talleres de uno de los grandes a nivel internacional, en el que las salas estaban bastante llenas.
A penas unas semanas antes había podido entrevistar a Javier a Cristina (acceder a la entrevista), con lo que pude comprender de primera mano el celo que le ponen a todo lo relativo a sus sala y al baile en general.
A lo largo de estos meses, Mambo Swing ha albergado multitud de eventos de todo tipo, SBK, bachata, salsa, tanto en formato mini-congreso como eventos de día, incluyendo grandes artistas internacionales y nacionales, amén de talleres ordinarios en sesiones regulares, shows y DJs de renombre.
El nivel de baile que he visto en salsa, me ha parecido muy bueno, tanto en línea como en cubana. Pienso que el hecho de tener una pista 100% salsa hace que los que no disfrutan del todo del SBK se sientan cómodos allí (cuando se da ese formato).
Diría también, que el público es de todas las edades y estilos, aunque he visto zapatos de baile y gente elegante, y para nada diría que es ambiente alternativo como el de las sesiones diurnas en mercados, salsódromos, etc.
Incluso se podría adivinar que se está convirtiendo en uno de los referentes de Madrid.