Sigo con este libro que empecé en febrero. Hace pocas semanas en Cats, hubo una presentación de RRPP para la temporada 2018-19, y el jefe de sala, en un gesto a agradecer, dijo claramente que estaban ahí para hacer la sesión más grata: Bailar con el público, etc.

Pero cuando vi a algunos de ellos, bailarines de renombre, la verdad es que me planteé hasta qué punto no es grotesco que un recién iniciado pueda sacar a bailar a una bailarina de ese nivel.

De hecho, en mi artículo anterior, ya comenté cómo a primera hora en alguna sesión, me ha tocado bailar con gente muy de iniciación, y aunque en este caso ellos estén trabajando, no sé si la depresión post-baile les rentará.

Otra cosa es que haya bailadores de cierto nivel a la espera de que poder bailar por falta de público… Recuerdo que una conocida del mundo-salsa me decía: No soporto haber estado media hora maquillándome para esperar a que un triste me saque a bailar.

A colación de frustraciones, este verano en Winston Latino (Benidorm) he visto a una profesora realmente buena tener que dar un taller de rueda para turistas, y yo en su lugar, igual hubiese tomado un cubata para aguantarlo.

Lo más patético era ver los comentarios de alguno que otro que no sabía hacer el básico, hablando de bailar con ella después del taller. ¿Qué se les pasará por la cabeza en momentos así?

Ya dije que quizás no todos son un alarde de conversación, pero me pregunto si al final lo que se llevan por cada uno de nosotros, merece algo más que un saludo y preguntar si has aparcado fácil. tendría que saber también su «fijo».

Y como hablé con Jose, ¿cuánto estamos dispuestos a pagar por entrar a una sala? a partir de ahí, va el resto…

Igual el all-in-one es la causa raíz de todo esto. ¿Seguro que a un profesor de alto nivel le gusta ser RRPP en una sala? Y otra vez, hay que volver a los argumentos de siempre:

¿Un exceso de profesores ha devaluado el gremio?, ¿un exceso de eventos hace que, como decía Mara, buenos profesores queden fuera de estos en favor de gente con agenda? ¿hay RRPP haciendo de profesores y profesores haciendo de RRPP?

Quizás entendiendo sus motivos, pueda obviar ese small-talk que por otra parte, no siempre apetece, cierto que ellos hablan de sus cosas y nosotros de las nuestras.

Sí que estoy viendo que el mundo-baile es igual de frío que el resto de actividades de la vida cotidiana. Me he desencantado en algún asunto que he tenido que solventar días atrás. Hablaré de esto más adelante…

También soy consciente de que muchos pasamos por este mundillo, y al final los que se quedan, los que viven de ello, probablemente terminen indiferentes ante gente que no vuelven a ver cuando se olvidan del olor de una pista de baile o de una escuela.

Al césar, lo que es del césar…