Casi desde que empecé a bailar, he tenido claro que hay que diferenciar las figuras, lo que se hace, del estilo y el arte con el que se hace. Quizás porque he tenido buenos profesores que se han encargado de repetirlo en clase: Bailad, bailad, bailad.
Pero ha sido a colación los dos primeros minutos de este vídeo que vi el otro día en el muro de Carmen Lorente bailando con Felipe Polanco, cuando me he animado a escribir este relato.
Dejando aparte el final en el que se hace Salsa con dos, desde un punto de vista estrictamente mecánico, la mayoría de bailadores que conozco podrían hacer lo que se hace en el principio del mismo, pero casi ninguno se asoma siquiera a cómo lo hacen Carmen Lorente y Felipe Polanco.
Creo que es importantísimo recalcar todos estos conceptos porque veo muchísima gente que piensa que bailar de cine es hacer figuras complejas.
Para mí todas esas figuras hechas de una forma forzada terminan pareciéndose más a un espectáculo circense de segunda categoría, que al arte de una salsa bien bailada.
Y lo que es peor, no valoran la forma de bailar de otros que rebosan arte sin hacer todas esas secuencias.
Puede que sea también porque las figuras o los shines, a base de trabajo y de repetir, terminan saliendo y se valoran mucho al conseguirlo, y el estilo es algo que va mucho más ligado al talento innato.
En cualquier caso, igual deberíamos dejarnos llevar y sacar lo mejor de ese talento, y no forzarnos tanto a hacer todo lo que aprendemos en talleres o a la tendencia. Lo veo mucho en gente que me gusta como baila, y llevados por la corriente actual se ponen a hacer rumba y lo echan todo a perder.
Personalmente creo que no deberíamos hacer nada de forma forzada. Claro que, para eso probablemente haya que sentir pasión hacia la tumbadora de la orquesta, el bongó, la salsa.
Para colmo, como comenté hace dos años en este post, los profesores tienen muy complicado no enseñar figuras en sus clases y ayudarnos a disfrutar con los floreos, paseos, etc. porque se nos harían aburridas.
En cualquier caso, sí que desde aquí animo a sentir el baile de la forma en que lo describo, aunque yo mismo a veces vaya forzado con según qué bailadora.
Pienso que no es incompatible hacer figuras chulas con lo que estoy diciendo. Se trata de saber en qué punto dejan de serlo por complicarnos demasiado y olvidarnos de socializar y de bailar con arte, que en definitivas cuentas es de lo que se trata.
No nos olvidemos de que hacemos baile social.
Termino dejando un vídeo de Carmen bailando con Maykel Fonts en el que se hacen innumerables figuras con un estilo tremendamente rumbero (por mostrarla así también), y otro con Felipe Polanco del estilo al primero.