De siempre, las distintas generaciones han optado por un género musical u otro en función de muchos factores. En el Nueva York en los años 50, el chachachá le tomó la delantera al mambo (el primero era mucho más fácil de componer y de bailar). De hecho, este fenómeno fue algo que no gustó ni a músicos ni a bailarines de alto nivel.
Pero no siempre lo más artístico es lo puntero. en la película El color del dinero, hay una escena en la que Paul Newman le explica a Tom Cruise cómo el billar americano ha superado al billar francés por el mismo motivo que las damas son mucho más populares que el ajedrez.
(Nota febrero 2019: El Madrid Salsa Festival, se ha renombrado a Madrid Salsa Bachata Festival, lo cual es honesto por parte de la organización, y quizás un pelín desalentador para los apasionados de la salsa).
(Nota febrero 2019: En este artículo hablo de bachata de una forma popular… he dicho muchas veces que cuando se baila con talento, tiene un nivel artístico altísimo, tanto la sensual como la tradicional).
Volviendo a Madrid, el fin de semana pasado fue el Madrid Salsa Festival, y el social del viernes estuvo majo y me gustó. Pero el sábado decidí ir a tomar una copilla al Hotel Puerta América, a un sarao de los que montan algunas escuelas una vez al mes.
Allí estaba mi amiguete Copín, y comentando el tema con él, me decía que la bachata se estaba comiendo un poco a la salsa por los pies en ciertos entornos. Que The Host entre semana, estaba llenando más su sala con sesiones bachateras que con la salsa de hace dos o tres años.
Luego nos paramos un poquillo a ver cómo Maracas parece que está también calzando más bachata que salsa en su sesión de los viernes. No sabemos si por hacer competencia a The Host, o por seguir la tendencia bachatera que parece que se está dando.
Incluso llegamos a comentar que parece que Salsea esté haciendo más énfasis en este género que en el tradicional. En cualquier caso, es una visión subjetiva en la que ambos coincidimos.
Yo sí que he visto que, en los últimos años, la bachata ha pegado un salto de gigante en Madrid, y es uno de los géneros que más evolución ha tenido. No sólo en cuanto a música (con los covers), si no en look y en estilos de baile, y es que al público le gusta.
Además, es curioso pero en Benidorm (por ejemplo), no es difícil entrar a una zapatería local y ver que tienen bachata de música ambiente.
Así que puede que lo que tengamos por delante en el mundo-latineo sea una generacion de bachateros treintaneros dispuestos a llenar las pistas haciendo bachata sensual, con una imagen mucho más juvenil que la del clásico cliente de bailes de salón: La camiseta ceñida, el gimnasio…
Si lo miramos con un criterio objetivo, la bachata permite un lucimiento estético perfecto, a una ritmo más suave que la salsa, y aparte lleva un acercamiento intrínseco entre bailadores, lo que motiva mucho más a según qué público.
Y si nos paramos a pensar en gente de mediana edad en adelante, las rodillas y articulaciones en general, sufren mucho menos que haciendo salsa.
Por si fuera poco, a mí me parece que se empieza a disfrutar antes en pista haciendo bachata que haciendo salsa.
Si todo esto se cumple, y teniendo en cuenta que los empresarios del sector trabajan por dinero y no por amor al arte, no es de extrañar que a medio plazo inviertan la mayor parte de sus esfuerzos en este género.
Puede que el Bachatea World Congress pase a ser lo más puntero en congresos, los DJs de las salas se focalicen en ella, y que las escuelas empiecen a darle más horas semanales. Sólo el tiempo lo dirá.
Igualmente dirá si es algo pasajero o ha venido para quedarse. Ahora que estoy haciendo secciones de historia en la página, estoy viendo que han sido multitud los géneros que parecía que iban a terminar con la salsa, como el merengue, el reggaeton, etc., y ahí sigue década tras década.
En los 80 se escuchaba pop, en los 90 techno, ya en este siglo house… y sin embargo la salsa siempre ha mantenido su público desde hace ya varias décadas, conviviendo con todos ellos. Ahora también, sin salir del latineo, con la bachata y con la kizomba.
Vamos a ver qué va pasando… pero entre los covers, que la hacen música internacional, y los nuevos estilos de bailarla, igual termino viéndola como un género no-latino en sí, si no globalizado con origen latino.