never stop learning concept on blackboard

Cómo aprender a bailar salsa: Mi experiencia

Escribo estas líneas en enero de 2019, y creo importante puntualizar que soy varón, ya que las mujeres pueden tener patrones totalmente distintos a la hora de aprender cualquier danza.

Empecé a bailar en Madrid en septiembre de 2012, y salvo que veas que el blog lo tengo desactualizado, seguiré aprendiendo cuando lees estas líneas, porque aunque considero que todos tenemos un tope como bailarines, la mayoría de nosotros nunca llegamos a alcanzarlo.

Aparte, creo que siempre se pueden aprender nuevas cosas que no van a subirnos de categoría (por decirlo de alguna forma), pero nos van a servir como entretenimiento, motivación, y nos van a permitir seguir gozando en pista.

De hecho, creo que los profesores son los primeros que deberían seguir reciclándose a lo largo de toda su vida.

Basicamente, creo que hay 4 formas de aprender:

  • Cursos intensivos: Para ver si te gusta algo cuando no sabes ni de que va. Desde ver si te gusta la salsa, hasta iniciarte en giros triples en escenario, pero es un arranque en algo, no el desarrollo como tal. Valen también por ser periodo de verano.
  • Clases regulares: No veo otra forma de progresar desde básico, ni de llegar a avanzado. Una vez en tal nivel, lo veo recomendable, pero no necesario.
  • Talleres en discotecas: Para nivel intermedio preferentemente, como una forma de coger más tablas, de complementar las clases regulares. No lo veo lo mejor para aprender desde básico, ni para mejorar una vez estás en avanzado.
  • Talleres en congresos: A partir de nivel intermedio. Tampoco los veo para aprender desde básico, pero en este caso sí para crecer aunque estés ya en avanzado.

Arrancar: Nivel iniciación y nivel básico

Yo arranqué en salsa en clases regulares, y bachata en intensivos, y en ambos tipos de baile progresé hasta cierto punto de forma paralela… Incluso diría que más rápido en bachata, que me parece más sencilla. El tiempo, la música en sí, y los nuevos estilos de baile, han hecho que prácticamente sólo baile salsa.

No obstante, si tuviese que recomendar una forma de iniciarse, creo que esta sería las clases regulares, y si tuviese que evitar algo (a este nivel), serían los talleres en discotecas y en congresos, que los veo más adecuados para gente que ya baila algo. Quizás podría hacer un intensivo para ver si me gusta. Volveré a ellos.

¿Por qué clases regulares una vez que sabes lo que te gusta? Creo que la mente humana no está diseñada para aprender una gran cantidad de cosas en muy poco tiempo, si no para ir asimilando conceptos poco a poco, haciendo la digestión de estos, y hacer que se incorporen en nosotros como si de una rutina se tratase.

Creo que en este sentido no aporto nada nuevo… pasa lo mismo con cualquier materia en una universidad, o simplemente con aprender a conducir.

Los talleres en discotecas, los he visto siempre como un complemento a las clases, ya sean estas regulares o intensivos. Se cogen figuras nuevas, se aprende algún detalle, pero no considero que se pueda tener una progresión de una forma estructurada, ya que el público cambia todos los días, y los profesores tienen una rotación muy alta.

Y los congresos tienen un componente muy similar al de las discotecas, pero con más nivel. Y aquí sí que es casi imposible que se vuelva a coincidir siquiera en la misma sala hasta un año después con la siguiente edición del evento.

Nivel intermedio

El nivel medio, creo que es el que debería corresponder a la mayor parte de la gente, ya que alcanzar el avanzado no está al alcance de cualquiera, pero la realidad es que apenas se pasan unas semanas, meses con suerte, en iniciación, y la gente ya se está apuntando a este nivel.

Eso hace que el nivel avanzado esté lleno de gente con nivel intermedio.

En cualquier caso, en lo que yo considero nivel intermedio, que es llevar bien el ritmo (parece algo de básico, pero no lo es), hacer figuras de complejidad media, saber qué procede con según qué tipo de salsa esté sonando, poder bailar con cualquier chica de la sala (a menor nivel que las mejores, y a mayor que las recién iniciadas), creo que lo ideal es hacer una combinación de las 4 formas que he descrito, dándole prioridad a las clases regulares.

Cuando (de verdad) ya tienes un nivel medio, puedes ir a congresos a perfeccionar, a discotecas a coger ideas nuevas y a conocer nuevos profesores (como en congresos), y quizás a algún intensivo muy concreto de algo que te llame la atención, o por ser verano.

Yo no dejaría de ir ya a clases regulares, puesto que en la progresión hasta avanzado, hay mucha tela que cortar en este nivel, y sigue siendo algo que requiere una repetición, una asimilación, una constancia.

Las figuras se van, va quedando una forma de moverse, de pensar, de dejarse llevar, de interactuar con la pareja, de comprender la música… todo esto se va dando cuando se practica de forma regular, preferentemente en un entorno en el que te sientas cómodo.

Insisto en que salir de la zona de confort e ir conociendo otros mundos, abre mucho la mente para alcanzar una versión propia bastante mejorada.

Con este nivel, es cuando ya puedes bailar horas y horas… ya no estás limitado a las 4 cosas que sabes en iniciación/básico, y ya te sientes fuerte como para bailar con casi cualquier chica.

Hay gente que en intermedio se arranca ya con coreografías. Tengo mis dudas de si con este nivel, una compañía se debería plantear actuar más allá de en una fiesta de escuela, o en una sala pequeña.

Nivel avanzado

Aquí puedo hablar de salsa cubana, porque en línea no he llegado a tenerlo (otra cosa es que, al igual que mucha gente, me meta en la clase que me dé la gana porque en esta ciudad nadie dice nada). De hecho, quizas podría estar en intermedio-avanzado el resto de mi vida en cubana… pero insisto en que esta ciudad es como es.

Incluso aquí, veo bueno tener una regularidad de asistencia a talleres/clases. Ya no tan necesario como en niveles anteriores, pero sí recomendable, aunque se busquen congresos de alto nivel en los que mejorar.

Puede que se haya buscado un cambio de profesor con respecto a años anteriores para buscar nuevos formatos… cada persona es un mundo. Yo he procurado volver a lo que me hace sentir cómodo, sin que eso me haya hecho tratar de explorar nuevas vías.

Es en el nivel avanzado donde veo que los talleres en discoteca quedan más fuera de lugar, salvo que lo que se busque se la parte social. Casi nadie va a estar a tu nivel, y te puedes sentir muy frustrado con chicas (soy chico) que apenas saben hacer bien siquiera la parte fácil de la figura.

Aquí en congresos, aunque no retengas la figura, sí que puedes coger detalles (técnica, movimientos, algo de estilo) de los realmente buenos, que puedan hacer que marques una diferencia hacia tu mejor versión.

En lo que a intensivos se refiere, son una buena opción para hacer lo mismo que en congresos pero repitiendo y perfeccionando más la figura, los pasos aprendidos, de forma que la interiorices más. en cualquier caso, debe ser de alto nivel tanto en profesor como en alumnos.

Volviendo a las clases regulares se refiere, si tienes la suerte de encontrar una escuela que respete los niveles, yo creo que se puede aprovechar muy bien el hecho de estar todo un curso con gente tal categoría. Si no, puede ser frustrante apuntarte a avanzado y encontrar gente que no da, ni de lejos el nivel.

Pero si lo encuentras, hacer cosas complicadas y tener varias clases para repetirlo, es algo que te va a ayudar mucho. hacer nudos complejos, pasos libres de calidad, etc.

Aquí es donde, incluso a veces se te hace un poco amargo bailar con gente de iniciación… donde estás como loco por coincidir con gente de tu nivel, que les conozcas de tu escuela, del circuito en general…

Y aunque se puede empezar desde mucho antes, quizás es en este momento idóneo en el que se debería plantear la opción de hacer coreografías en compañías de baile. Habrá quien se lo plantee desde intermedio, pero yo hablo de poder actuar en eventos de nivel.

Huelga decir que, en todos los niveles que he descrito, no es la escuela la que marca el nivel, si no el alumno con cómo sea capaz de asimilar lo que en ella aprende, y por supuesto la cantidad de horas de pista (sala de baile) que tenga en el cuerpo.

Es tan grande la diferencia entre alguien que baila 2 veces por semana en pista, y alguien que va un par de veces al mes, que en un año puede parecer que ni siquiera hayan empezado en la misma escuela en el mismo año.