Relatos Salseros - Icono Audio

Hay un antes y un después de ser salsero (podcast)

Hay un antes y un después de ser salsero. Da igual que lleves una semana, un mes, o un año sin bailar.

De repente, entras en una cafetería de un pueblo perdido de La Mancha, y si están poniendo salsa, empiezas a mover los hombros… Te pondrías a bailar allí mismo, no lo haces porque piensas que no es el sitio para ello, pero el cuerpo te lo pide. A lo mejor no bailarías la canción entera, pero te marcarías unas figuritas seguro.

Estás en una boda y te ocurre lo mismo. hasta que vas mazao y ya bailas todo, te puedes pasar toda la tarde escuchando a Bisbal y a Enrique Iglesias y como si nada, si acaso un bamboleo tonto. Pero ponen salsa y se te enciende el chip.

Por algún motivo, la salsa te marca de una forma especial respecto del resto de estilos musicales que has bailado.

Puede que tu etapa de salsero ya haya pasado, que no conozcas ya ni los congresos que van saliendo, que no vayas a volver a pisar pista en tu vida, pero la salsa deja una marca en ti que difícilmente consigue otro estilo de ocio.

Has sido tan feliz cerrando una sala de baile, haciendo una rueda en la playa de Cullera, o haciendo un calentamiento en tu escuela mientras saludas a la gente de tu grupo, que difícilmente puedes olvidar toda esa etapa.

No tienes por qué pensarlo en ese momento, es tu subconsciente el que se encarga de todo.

Leí hace poco que cuando uno extraña un lugar, lo que realmente extraña es la época que corresponde a ese lugar, que no se extrañan los sitios, si no los tiempos… si a esa reflexión, le añadimos que la música es uno de los estímulos con mayor capacidad de regresión, tenemos el cocktail perfecto.

Yo pienso que cuando pase el tiempo y escuche salsa, seré capaz de volver un lustro o una década atrás y volver a encontrarme con todo ese entorno que me hizo tan feliz. todo ello inconscientemente.

No tendré piernas para ello, pero pensaré que estoy bailando.

Beethoven siguió componiendo después de quedarse sordo, y estoy seguro de que Di-Estéfano, cuando ya no podía ni moverse, seguía sintiendo el olor a cesped cuando encendía la tele para ver un Madrid-Barca.

Creo que si dentro de unas décadas voy por un paseo marítimo lleno de locales con la pista de baile visible desde fuera, y en uno de ellos ponen salsa, sin duda alguna me pararé un poco a ver qué figuras están haciendo. Y seguro que es de los que mejores recuerdos me trae.

Efectivamente, hasta dentro de unas décadas no lo sabré, pero creo que la salsa se instala en las personas mucho más de lo que pensamos. Y bueno… eso si no he seguido bailando…

Volver al índice de Podcasts