Madrid Salsa Festival, que vueva el Auditorium

Porque el Salsa Festival de Madrid, es uno de esos eventos que gusta que haya en tu ciudad.

Es el all-stars del que muchos salseros esperan disfrutar sin tener que pasar el fin de semana fuera. Es de una de esas citas que han conseguido despertar afición a todo un público, que luego les lleva a seguir en el mundo-salsa en todas sus modalidades (escuelas, salas de baile, etc.).

Ya en Novotel, una vez dentro, y hasta las dos y media que me fui (anoche), en la sala de salsa se respiraba muy buen ambiente, gente elegante y con nivel. ropa de congresos, de las que se ven poco en otros sitios, buena música, y como detalle, me fijé que los bailarines hacían muchos pasos libres acompañando a la línea.

Es verdad que era la noche del viernes, y que a lo mejor hoy sábado tiene algo más de magia, pero lo que he visto, me ha hecho echar de menos el Auditorium.

El Auditorum era como el Disneyland de la salsa. Olía a timbales según aparcabas el coche, y durante metros y metros y metros, sólo veías salseros. Una vez dentro, el tamaño de las salas te transportaba como en ningún otro sitio que yo haya conocido.

Un amiguete del mundo-salsa, Filipe, que en realidad es más kizombero que otra cosa, recuerdo que describía lo del Kizomba Feeling comentando que le impresionaba alzar la vista y no ver dónde terminaba la gente. Y creo que tenía razón, yo lo veía como un hotel temático del latineo.

El hecho de haberlo cambiado a Novotel, bajo mi punto de vista, ha cambiado el congreso totalmente. sigue teniendo la magia de siempre en algunas cosas, pero te das cuenta de que algo es diferente según llegas a recepción y ves gente no salsera por allí terminando de cenar.

Las tres salas que hay, son ostensiblemente más pequeñas que las del Auditorium, donde además había más número de salas. De hecho, la sala central de Novotel será algo así como una de las pequeñas del Auditorium. Por poner otro ejemplo, la sala de baile del Hotel Bali de Benidorm, es también mucho más grande que la del Novotel.

En realidad, habiendo conocido ediciones anteriores, da un poco de nostalgia pensar que lo que yo consideraba el referente en cuanto a eventos en España, ha pasado a ser uno de los grandes, sin más.

Cabe destacar que en Madrid y en otoño-invierno, no se puede pedir mucho más, como playa o piscina…

Personalmente creo que Madrid, una ciudad que rebosa salsa, tanto en forma de escuelas como de salas de baile, con bailarines de alta categoría, merecería que el Auditorium siguiese siendo la sede de este pedazo de congreso.

Hay cosas que en la medida de lo posible y cuando se puede, hay que cuidar, son casi patrimonio de una ciudad… marcan la diferencia para hacer de un evento algo internacional.

Desconozco los motivos de este cambio, y tampoco voy a hacer por enterarme, pero a mis ojos es como si el Real Madrid hubiese perdido el Bernabeu para irse a La Romareda.

Aun sin vender a Ronaldo, algo cambiaría en el ambiente. Deberíamos movilizarnos, como hacen en otros gremios cuando les quitan algo 🙂 hacer algo en change.org o similares.

Con todo y con eso, dadas las circunstancias, la impresión ha sido buena: música, suelo de las pistas, organización, nivel de baile…