Llevamos ya más de una semana confinados, y por lo que dicen los que tienen información, aún queda lo peor antes de empezar a sentir el final del túnel.

Sin embargo, estos días están siendo algo menos duros de lo que me esperaba, y seguro que esta sensación la tienen muchos bailadores (no aquellos que hayan sufrido alguna pérdida).

Encender el ordenador y tener varias clases en streaming, alguna sesión salsera en el mismo formato (las hay hasta en vinilo), los grupos enormes de gente del baile a los que se envían vídeos, etc.

Por cierto, doy gracias a los administradores de grupos que no los están bloqueando estos días, y que están permitiendo enviar contenido ajeno al baile. Creo que es importantísimo que la gente encuentre un medio por el que desfogarse participando, compartiendo, reenviando, comentando…

Pero sin duda, los que más admiración están generando en mí son los profesionales, que aun siendo golpeados directamente por esta crisis, están sacando lo mejor de su ingenio de forma gratuita para todos nosotros.

Coreografías para canciones llenas de optimismo, gimnasia, clases de cocina, juegos de mesa a través de redes… Nos están ofreciendo de todo para sobrellevar algo mejor este proceso.

Hay una escuela aquí en Madrid, que se está entregando realmente en todo esto, pero no creo que sea el momento de dar nombres. He visto hasta un evento on-line.

Ya dije en mi anterior relato, que se echaba tanto de menos el hecho de bailar en sí, como el componente humano que tiene el baile. Y esto creo que vale para todos los perfiles que se dan en una pista o en una escuela.

Cuando empecé a bailar hace ahora más de 7 años, enseguida vi que había gente que salía sola de casa y al llegar a las salas se veía arropada por gente conocida, casi como si estuviesen en un pueblo pequeño. Eso en otros ambientes es impensable.

Una vez más, me siento afortunado de pertenecer a la comunidad de baile.

Creo que sería importante seguir adelante con esos gestos que están haciendo más llevadero este periodo tan especial. Desde los aplausos de las 20h a todo lo que he descrito en este relato.

Digo esto porque todos los movimientos sufren un desgaste con el pasar de los días, sea cual sea la causa que los genera.

Por mi parte, participaré en todo aquello que pueda, porque creo que entre todos, estos momentos son mucho más fáciles de sobrellevar.

Otra vez, mucho ánimo, especialmente a los que hayan perdido algún familiar estos días.